En un espacio muy reducido en el entorno del barrio de Malasaña, han aparecido dos estructuras de características similares e inquietantes diferencias. En LAPIEZA, sala experimental de estética relacional, puede comprobarse cómo desde hace varios meses crece modularmente una estructura verde como la yrealydad, compuesta d_latas y otros elementos. Por otra parte, en el escaparate de una calle paralela, en la esquina de una tienda de chucherías, ha hecho su aparición una reproducción a base d_latas a tamaño estupendo del Empire State Building de Nueva York. A primera vista resaltan las similitudes: dos estructuras conformadas mediante el apilamiento d_latas de refresco, la una remite a un espacio yreal en construcción, y la otra a un espacio real construido. Entrar a hablar de la originalidad o posibilidad de mutua influencia de una estructura sobre otra está fuera de lugar, toda vez que el apilamiento d_latas es una actividad cotidiana en el barrio, ya se haga en las estanterías del súper mercado, en la nevera de casa, o en la calle los fines de semana…unos montones son más atractivos que otros, y algunos son asquerosos, y debe bregar con ellos el servicio municipal de limpieza, la mañana de cada día desde el viernes hasta el domingo…pero este es otro asunto diferente, aunque también sea d_latas. Y hasta aquí las similitudes cuando d_latas se trata. A partir del apilamiento surgen las primeras diferencias, pues si la estructura yreal es una acumulación lenta y experiencial, en la que cada lata es un acontecimiento, en la torre del escaparate, el apilamiento d_latas es una ostentación de la inmediatez y exuberancia de la mercancía. Resulta paradójico entonces que las latas de la estructura yreal se acumulen vacías de líquido, cuando están llenas de experiencia, mientras que las latas del edificio imperial estén llenas de bebida industrial y vacías de todo contenido, excepto el que su imagen publicitaria pretende construir a base de estereotipos…un vacío estereotipado que no impide que se vacíe su contenido en un acontecimiento que se llene de experiencia, pero cuya sustancia nunca provendrá de la plenitud que promete su publicidad. Pero las diferencias alcanzan más dimensiones que las que el contenido d_lata. La estructura tridimensional que se establece en el espacio es significativa cuando hablamos d_lata. Mientras la Fascia Lata (pues así se denomina la estructura yreal) crece rizomáticamente en todas las direcciones del espacio y del tiempo, a la espera de una trayectoria algo más definida que la transforme en estructura radicante, la construcción imperial crece, como no podía ser de otra forma, vertical, hacia arriba y de una sola vez. Sin ni siquiera entrar a valorar la estructura fálica que el edificio d_lata manifiesta, y la preponderancia “imperial” de sus formas, es innegable que la estructura es coherente con el logo que se exhibe en una repetición que se d_lata obsesiva. De esta manera, y sin aspirar a un formalismo exagerado, resulta curioso comprobar cómo todavía unas determinadas formas vehiculan un contenido ideológico mejor que otras. La imposición imperial es un todo ideológico coherente con el nombre de un célebre edificio, su forma vertical, el refresco hegemónico, la forma súbita y brillante en la que aparece (su puesta en escena), la repetición de un logo, el despilfarro en la acumulación de mercancía desaprovechable, la banalización a la hora de establecer vínculos entre mercancía y experiencia, etc. La yrealydad,por su parte, es un todo ideológico coherente con un nombre inconstante y paradójico, su forma rizomática (que no descarta la radicante, pero que no encuentra lugar para establecerse ni siquiera precariamente), los desechos del refresco hegemónico, la forma lenta y procesual en la que aparece (su puesta en escena), la repetición del verde y los circuitos impresos, la reutilización de la mercancía desechada y obsoleta como signo aún servible para procesos semionáuticos, la parodia de los vínculos entre mercancía y experiencia, etc.
